Durante la pandemia de la COVID-19 las empresas han intensificado los tratamientos de desinfección y limpieza de los espacios, ya que está demostrado que es lo más efectivo para luchar contra la propagación del virus.
Según la Organización Mundial de la Salud, «la limpieza ayuda a eliminar los agentes patógenos o reduce considerablemente su concentración en las superficies contaminadas y por ello es un componente indispensable de cualquier método de desinfección».
Pero en estos tratamientos no todos los productos desinfectantes son igual de efectivos. Para evitar la propagación del coronavirus hay que utilizar los desinfectantes aprobados por el Ministerio de Sanidad.
Estos productos son los únicos desinfectantes que garantizan un tratamiento efectivo contra la COVID-19, a pesar de las diferentes informaciones que han aparecido al respecto en los últimos meses sobre los tratamientos con ozono, los arcos de desinfección y las lámparas de radiación ultravioleta UV.
Sobre estos tratamientos, la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA) ha emitido una nota aclaratoria al respecto.
Advertencias sobre los tratamientos de desinfección con ozono, arcos de desinfección y radiación ultravioleta UV
Ozono
ANECPLA explica en la nota aclaratoria que como la Unión Europea todavía no ha evaluado la eficacia del ozono como desinfectante de uso ambiental todavía son una incógnita las dosis que hacen falta para garantizar su eficacia como viricida y sus efectos para la salud. Añade además que este producto está en fase de revisión por la Agencia Europea de Productos Químicos (ECHA).
Arcos de desinfección
Por internet se han hecho virales webs que ofrecen arcos que nebulizan a personas para quitarles el virus. Estos, lejos de desinfectar a la persona, pueden ser muy peligrosos para la salud. Ante estas informaciones, la Asociación de Empresas de Sanidad Ambiental asegura que no existe en España ningún producto biocida que esté autorizado por el Ministerio de Sanidad para utilizarse mediante nebulización sobre las personas.
No solo no pueden aplicarse sobre las personas, sino que los profesionales que se encargan de la desinfección y utilizan estos productos tienen que equiparse con artículos de protección personal, a causa de su calificación como productos peligrosos.
Radiación Ultravioleta UV
Ante la proliferación de anuncios de lámparas con radiación ultravioleta UV para combatir el virus, ANECPLA pone en duda su eficacia contra la COVID-19. En este sentido, asegura que, a pesar de que la radiación UV se utilice como un complemento en ciertos tratamientos de desinfección, este tipo de lámparas no son efectivas contra el virus. Además añade que tampoco se sabe el tiempo de exposición a estas lámparas que tiene que haber para evitar contagios o para no lastimarse la piel ni la vista.
A todo esto, tan solo añadir que si deseas aplicar tratamientos de desinfección efectivos contra el coronavirus, debes contactar con nosotros.
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